lunes, 30 de mayo de 2011

EL TRATADO ANTINACIONAL DE ITAIPU DEBE SER ANULADO POR LAS LUCHAS UNIDAS DE TODO EL PUEBLO

Sólo un levantamiento general del pueblo podrá formar un gobierno provisorio de democratización nacional capaz de luchar
en forma efectiva por la recuperación de la soberanía territorial y energética del Paraguay usurpada por el Estado del Brasil
 En el Panel-Debate sobre la Soberanía Energética en la Gobernación del Caaguazú, organizada por la Asociación de Abogados Liberales de Coronel Oviedo, realizada en el mes de marzo de este año, un miembro del Partido Comunista Paraguayo (independiente) pidió la palabra para expresar la disconformidad del Partido con los “argumentos” del Ing. Ricardo Canese, (uno de los principales “negociadores” del gobierno de Lugo) en el sentido de que en ningún momento de la negociación con el Brasil, sobre los alcances del Tratado  se planteó el problema de la pérdida de la soberanía territorial del Paraguay sobre el gran Salto del Guairá.

Ningún gobierno, desde la caída de la dictadura militar de Stroessner, incluido el actual, hizo la más mínima protesta o planteamiento al Brasil por la ocupación  por parte del Brasil del territorio nacional en el gran Salto del Guaira, una situación escandalosa y humillante. denunciada por numerosas organizaciones y por nuestro partido reiteradas veces, en especial en el documento escrito por Oscar Creydt en 1972 (escrito antes de la firma del Tratado):
El Salto del Guairá ha sido vendido por el régimen militar antinacional de Stroessner
Y tal como lo señaló el Llamamiento del Comité Central en 1973
 Frente al peligro brasilero lucha unida de todos los patriotas
 ¡La patria en peligro!
¡Luchemos unidos todos los compatriotas para salvar a la patria!
(Ver 2° Apendice: “CONDOMINIO”):

“La finalidad de la ocupación brasileña de la costa paraguaya del Salto no es quitar al Paraguay su condominio, que no es más que una fórmula jurídica vacía, sino despojarlo de su soberanía territorial sobre la mitad de los saltos, y, por tanto, sobre su potencial energético. Este despojo es ejecutado reemplazando la soberanía efectiva por un condominio jurídico, puramente formal y protocolar”.

Sin embargo, la posición de TODOS  los gobiernos que suce
dieron al del entreguista y vendepatria Stroessner han persistido en la idea de engañar al pueblo respecto del tratado antinacional de Itaipú, y en legalizar la situación del “Condominio” cuya figura legal es la “Binacional”. Se hacen ciertos reclamos, pero no se desenmascara la pérdida real de la soberanía territorial, que da lugar a todos los despojos.

El senador Galaverna declaró en plena campaña electoral del 2008  el 14 de abril, a Radio Ñanduti: que “el Paraguay no puede exigir  nada al Brasil porque está en inferioridad de condiciones al ser un país pequeño y con pocos habitantes, comparado con el poderío del Brasil”, (En este sentido no hizo otra cosa que seguir la línea brasilerista del Grl. Lino Oviedo quién desvergozadamente plantea que “No hay que renegociar el Tratado de Itaipú”...). Por su parte R. Canese repite continuamente que “El Tratado está bien, sólo hay que hacerlo cumplir”. Algo parecido declaró el Ing. Gustavo Codas Fridman, director de Itaipú antes que él. (Este planteamiento es algo que nadie hasta ahora, salvo Raúl Sapena Pastor el ex canciller entreguista de Stroessner se animó a decir. ). El  POL grupo oportunista que  usurpa el nombre de nuestro partido desde 1965, difunde desde entonces una cantinela parecida a la del Ing. R. Canese defendiendo el Tratado. Ambos planteamientos profundamente oportunistas están hechos con el sólo fin de utilizar la “Compensación(es decir el precio de la traición a los intereses nacionales) para poder disponer de más fondos,  para repartirlos entre una minoría de allegados o correligionarios, y para mantener la situación de dominación del capital extranjero norteamericano-brasilero, así como también la de sus socios los grandes latifundistas, exportadores e importadores.

El de Galaverna es profundamente derrotista en cuanto al futuro de la nación paraguaya; el de Canese, a parte de defender abiertamente el Tratado antinacional, sólo se orienta hacia reclamos de incierto cumplimiento futuro (¿2023?). Los dos son planteamientos antinacionales que nada tienen que ver con el sacrificio extremo que nuestro pueblo hizo durante la guerra de 1864-70 a cuyo frente estuvo  el Mcl. López, contra el peor enemigo del Paraguay el Imperio del Brasil. Cuyos sucesores ahora se disfrazan de demócratas para completar el objetivo principal de la Guerra -dominar por completo al Paraguay, convertirlo en un Estado más del Brasil (como declaró que le gustaría a L. Oviedo), y para engañar a su pueblo y al nuestro.
               
Lo cierto es que el pueblo paraguayo lucha cada vez más contra las consecuencias del ignomi nioso Tratado. Bajo las continuas denuncias y golpes contundentes de los obreros y sindicatos de la energía de FETRASEP, SICHAP, STEIBI, SITRANDE, de personalidades y organizaciones democráticas, se está formando un frente muy amplio contra el Tratado y sus consecuencias directas, tendiente a su anulación. Por esta razón el gobierno del Brasil se ha visto obligado a transar algo, por miedo a un levantamiento del pueblo paraguayo que podría acarrear el levantamiento de su propio pue blo. El gobierno de Lugo y sus “técnicos especializados” R. Canese, el actual “director” títere, derrochador de Itaipú Gustavo Codas Fridman y otros se ven obligados a hacer esfuerzos para “defender” los tibios pedidos -antiparaguayos- que se hacen desde el gobierno paraguayo, al gobierno del Brasil, en los que muy pocos creen, la mayoría de cumplimiento imposible o dudoso en el mediano plazo.

Se toman como base “los seis puntos” solicitados por el gobierno paraguayo actual al Brasil (y como dice el propio R.Canese “celebrados”  por el gobierno del Brasil –Sí, pero por su pobreza y entreguismo. Con esta “plataforma” a través de la Secretaría de Energía dirigida por la hija de R. Canese, se trata de convertir a las organizaciones y movimientos que realmente luchan contra el Tratado en una fuerza auxi liar de apoyo al gobierno para defender aspectos secundarios y para legalizar el humillante tratado. Las organizaciones de masas no deben dejarse engañar por estas maniobras sin futuro, por el contrario deben intensificar sin descanzo la lucha unida en un gran frente patriótico contra el tratado de Itaipú, a la vez que conduzca hacia la formación de un gobierno provisorio de salvación nacional, que llame a una Asamblea Nacional Constituyente libre y soberana, capaz de reclamar la anulación del tratado y la elaboración de uno nuevo,  que contemple los intereses de ambas naciones en igualdad de condiciones. La formación de este               frente es apoyado con energía por el PCP (independiente).

Todos los pasos que se den para desenmascarar y luchar contra del Tratado, por más tibios y contradictorios que fueren, como los del actual gobierno por ejemplo, deben ser impulsados y desarrollados por las masas de las ciudades y del campo. Sin embargo es necesario desenmascarar paso a paso, francamente, sin temor a perder alguna alianza, cualquier planteamiento que lleve a nuestro pueblo a la confusión y al conformismo respecto de la necesidad de la lucha por su independencia nacional, por su liberación de la dominación brasilera detrás de la cual está la dominación nortea mericana.

Los  argumentos del gobierno de Lugo y de sus asesores vendidos, se centran en obtener 240 millones de dólares más, a lo que llaman en concepto de “Compensación”, por el uso de la energía nominal que el Paraguay entrega al Brasil por la utilización de la energía que no consumimos. Es decir se busca que se le pague al Paraguay una cantidad aproximada por el consumo brasilero, a un valor de la moneda brasilera (real) atada a su vez a un valor del dólar muy bajo, que no cubre realmente el consumo permanente por el Brasil, sin tener en cuenta otros aspectos como la soberanía territorial, como si fuera una concesión benevolente del gobierno del Brasil, “para ayudar al Paraguay”.

R. Canese quiere hacer creer que este “dinero extra” se utilizará para el “desarrollo” del Paraguay. Dice que hay que “hacer como Noruega” que utiliza su petróleo para el desarrollo, oculta intencionalmente que ese es un país fuertemente desarrollado y que como otros países de Europa, a través del capital financiero invertido en países como el nuestro, se enriquecen a costa de los pueblos pobres de A. Latina, Africa y Asia y quiere que seamos un país dependiente por completo del imperialismo norteamericano como Chile, en donde su cobre casi sin industrializar es explotado por grandes corporaciones extranjeras y comercializado por ellas. Son mentiras de Canese para presentarse como un “estadista”, y cobrar jugosas comisiones como “experto”.

Todos saben que el verdadero desarrollo no es posible sin que se produzca una reforma agraria que entregue las mejores tierras y ayuda verdadera para cultivarlas a no menos de 300.000 familias campesinas en forma inmediata, y que se suspenda la política de los créditos usurarios que el Estado contrae con Norteamerica y con el Brasil. Mucha gente sabe ya que esto sólo puede conseguirse con una RE VOLUCION democrática agraria campesina de liberación nacional, y que para que esto se produzca es necesario un levantamiento ge neral del pueblo, que deberá llevar necesariamente al establecimiento de un gobierno provisorio de democratización, compuesto por todas las fuerzas interesadas en un verdadero cambio en especial por las grandes masas de campesinos, obreros y de todo el pueblo. que termine con las componendas electoralistas y traicioneras, como en las que está envuelto el go              bierno actual con los partidos de grandes latifundistas, capitalistas y agentes del capital extranjero. También ya muchos saben que un cambio de esta naturaleza sólo podrá conseguirse con una lucha encarnizada contra las clases dominantes, mediante una guerra popular revolucionaria prolongada, mediante un levantamiento general del pueblo.

Esto es precisamente lo que los “negociadores” con el Brasil, de antes  y de ahora quieren evitar, porque están al servicio de los intereses de los representantes de las clases dominantes  (El mismo R. Canese pertenece a la familia de negociantes dueños de la cantera Cerro Lorito, parte de la negociación ilegal de la venta de ACEPAR, por eso el gobierno abandonó a los trabajadores de esa empresa  a su suerte. Gustavo Codas es uno de los principales accionistas de Azucarera Iturbe, hambreadora de obreros y cañeros.  Lugo está vinculado con la alta jerarquía de la Iglesia).

El otro aspecto  es que de R. Canese agita como si fuera una “conquista”? la posibilidad de la construcción de la línea de 500Kv, que sería realizada en forma “gratuita”, por el Brasil. El y G. Codas Fridman ocultan deliberadamente que esta construcción fue obstaculizada durante años por la “Binacional” del gobierno brasilero, para que el Paraguay NO SE DESARROLLE como bien denuncian SITRANDE y otros sindicatos y especialistas. Para esto el gobierno del Brasil ha comprado (por medio del dinero de la “Compensación”) a los gobiernos en treguistas y a muchos parlamentarios que el Paraguay tuvo sin parar desde la construcción de la usina hidroeléctrica hasta ahora. Es mentira que la construcción de esta línea de 500Kv pudiera ser “gratuita”, una “Compensación”, desde el momento que el Brasil ya consumió toda la energía generada por el Río Paraná por más de veinte años sin pagarle nada al Paraguay, equivalente en dólares a muchas líneas de 500Kv.  Esta línea de 500 Kv, que si bien favorece a algunas empresas nacionales ¿si se la aprueba? Ahora la “Binacional” de Itamaraty - demuestra algún interéses en su construcción, porque la colonización brasilera ha sido tan grande y profunda en el Paraguay que las empresas brasileras y norteamericanas NECESITAN  más energía para terminar de saquear las fuerzas productivas nacionales, a través de sus inversiones, aprovechando en especial la “mano de obra barata” y las tierras de más bajo precio que las brasileras. Como consecuencia de esta línea, tal como está planteada, la dominación brasilera en expansión, penetrará mucho más profundamente, hasta el Río Paraguay y hasta el Chaco... En lugar de traer desarrollo traerá más explotación pobreza y sobre todo inflación. Se oculta el hecho que desde el punto de vista geopolítico, el desarrollo profundo en territorio paraguayo de empresas mixtas brasileras (Un ejemplo es la gran planta de ADM  ‘Archer Daniels Midland Co.’, de las más grandes acopiadoras de cereales y financieras norteamericanas del mundo) que el grupo norteamericano-brasilero construye en Villeta, de almacenamiento y embarque en barcazas propias, que se fabrican a bajo costo en Naviera Chaco, llevan gran parte de la producción de soja, aceite y derivados en bruto, al Brasil –vía Corumbá para su industrialización y envío posterior a todo el mundo desde Sao Paulo–Santos y otros puertos del sur brasileño.

El gobierno, lejos de advertir al pueblo sobre estas maniobras, elogia al Brasil por su “comprensión” y porque “celebra” que el Paraguay haya solicitado sólo los seis puntos, de los que podrían ser sólo cumplidos dos a medias y los otros nunca, si se mantienen las actuales condiciones políticas. No hay un caso parecido en la historia de los últimos años en el Paraguay de una posición tan denigrante como la asumida por el gobierno de Lugo a través de sus técnicos más “avanzados”. Entre estos “técnicos” se ha formado un verdadero “eje” tendiente a justificar todo lo hecho por el gobierno de Stroessner, por orden de sus jefes brasileros respecto del tratado de Itaipú. Por eso son las declaraciones brasileristas ya mencionadas “El tratado está bien y lo que hay que hacer es cumplirlo”… Con razón hay muchas voces que dicen que el gobierno de Lugo es el peor desde el punto de vista de la lucha por las reivindicaciones principales del Paraguay en Itaipú. No hay forma de desmentir esto.

En lugar de corregir las fallas criticadas y de escuchar las opiniones muy objetivas que los sindicatos de la energía plantean desde hace tiempo contra la dirección de Itaipú y de la ANDE, el presidente Lugo siguiendo fielmente las directivas de algunos altos jefes de la Iglesia y del ejército, se dedicó a hacer pactos y componendas con los partidos de grandes latifundistas y de agentes del capital extranjero para que las masas no se muevan, salvo como fuerza au xiliar en su apoyo, para man           tenerse en el poder a cualquier precio. Para esto envia a sus emisarios a formar un seudo “frente patriótico” para apoyar al gobierno, para confundir a la gente.

En líneas generales estas observaciones demuestran que al gobierno actual no le preocupan los problemas más importantes relacionados con el tratado antinacional de Itaipú. Sus negociaciones no hacen más que continuar con la política de subyugación de nuestro país por el Brasil.

Hoy más que nunca es necesario que toda la nación se levante contra la política de servidumbre del Paraguay al Brasil impuesta por el régimen militar de Stroessner. Este es el problema más grave que se le presenta al Pargauay después de la época de su existencia como nación idependiente que duró hasta 1870.

¡Adelante, obreros campesinos, jóvenes mujeres, empleados,
y todo el pueblo
hacia la formación de un
frente patriótico amplísimo,
sin distinción de colores
para anular el
tratado de Itaipú!

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